Los emprendedores son expertos en mantener la organización y la productividad al teletrabajar. O eso se pensaba hasta que la pandemia de 2020 las obligó a quedarse en casa y notaron que tenían ciertas fallas al teletrabajar.

En el “antiguo normal” se podía escoger entre trabajar desde el hogar, ir a un café o hasta a un coworking. Y si estabas en casa, podías trabajar mientras los niños estaban en la escuela. Así estabas en un espacio organizado, de paz y silencio para ejecutar tus tareas.

Eso sin decir que tu escritorio solo tenía tus elementos de trabajo y no… digamos… los cuadernos de clase de tus hijos.

Ahora todo es distinto. Estás en casa, sin opción a buscar otro lugar, con los niños las 24h. del día y con todas las responsabilidades tanto del trabajo como del hogar.

Si te sientes abrumado, cansado y poco productiva por la crisis, te contamos que no eres el único. Miles de emprendedores en todo el mundo se han sentido como tú.

La buena noticia es que muchas han desarrollado métodos de organización que las ayuda a mantener su productividad a tope, sin sacrificar tiempo con su familia o su salud mental.

En este artículo te traemos 6 recomendaciones para que el orden sea impecable en tu rutina de trabajo desde casa y puedas mantener el foco para terminar tus tareas a tiempo.

6 recomendaciones para mantener el orden al teletrabajar

1.- Organiza tu día: Está claro que muchas veces pueden suceder eventos inesperados que debas atender en el momento, pero tú sabes muy bien que estas situaciones son una excepción.

Lo normal es que sepas con anterioridad qué tareas debes atender cada día y hasta cada semana.

Ya sea la noche anterior o esa misma mañana, organiza la jornada de trabajo. Haz una lista de tareas que no sea muy extensa y establece el orden de prioridad.

Dedica tus horas más productivas a la tarea más importante o más complicada de hacer y deja para después las que te resulten más fáciles y entretenidas.

¡Ey! Recuerda establecer los descansos en esa lista de tareas para reducir el estrés. Por ejemplo, ¿en qué momentos del día vas a tomar un café? ¿Qué tal establecer un momento para dar una pequeña caminata? ¿Y si pones en esa lista de tareas el momento en que meditarás? Aunque no lo creas, dejar por escrito tus actividades de relax cambia tu mentalidad y te prepara para afrontar tu día con la mejor actitud posible.

Que te sientas relajada mientras trabaja es una prioridad.

¿Cuáles son las mejores herramientas para organizar tu día? La que más te guste. Puede ser desde tu libreta preferida hasta Google Calendar.

2.- Rutinas – rutinas – rutinas: Las rutinas te organizan y te dan seguridad. Te permite saber cuáles son tus pasos 1, 2 y 3 para estar a tope en productividad y buen humor y así trabajar desde la serenidad.

Por ejemplo, ¿qué es eso que te gusta hacer antes de sentarte en tu oficina? Podría ser tomar un café negro, hacer algo de ejercicio, tomar una ducha, vestirte y desayunar.

La idea es enviarle un mensaje al cerebro que diga: ¡ahora sí estamos listos!

3.- Ten un espacio para trabajar: No es la primera vez que te damos esta recomendación. Pero es que es vital si quieres mantenerte organizada y productiva en el teletrabajo.

Es normal que cuando empezaste a ser asistente virtual y tus recursos eran limitados, trabajaras desde la cama o desde la mesa de comer. Sin embargo, a medida que vas tomando experiencia y más clientes, necesitarás un lugar en donde estés cómoda, enfocada y en orden. ¿Necesitas una habitación en tu casa? No. Pero sí necesitas un lugar que cuando llegues a él, digas “a trabajar”. Por ejemplo, la esquina de tu habitación o de la sala de estar, en donde pongas un pequeño escritorio y tengas tu computador, tus libros y todas tus herramientas a mano.

Cuando tu familia te vea en ese lugar, sabrá que estás trabajando y las distracciones se reducirán de forma notable.

Un tip extra: decora ese pequeño espacio con elementos que te den tranquilidad y te hagan sentir muy a gusto.

4.- Toma aire fresco: Muchas de las personas que teletrabajan desarrollan el síndrome de la cueva: no quieren salir más de casa. Y es que para qué van a salir: trabajan desde casa, comen en casa, se entretienen en casa… Aunque suena muy tentador, puede afectar de forma negativa tu creatividad, tu productividad y hasta tu salud mental.

Tu cuerpo necesita aire fresco, necesita sol y necesita contacto con otras personas. Es saludable.

Al estar encerrada, tus capacidades creativas se estancan, así como tu capacidad de resolver problemas.

¿Qué puedes hacer? Oblígate a salir de casa unos minutos al día. En tu calendario (punto uno de esta lista) designa 15 o 30 minutos para salir y dar una vuelta por tu calle. Hazlo de forma consciente: ve a las personas que están en la calle, observa los árboles o el cielo, escucha los ruidos… Todas estas sensaciones ayudan a desarrollar tu capacidad creativa y te desconectan del trabajo.

5.- Aplica un método de productividad: El gran secreto de los métodos de productividad no está en el tiempo de trabajo, sino en la obligación de tomar descansos. De esta manera, tu cerebro se mantiene fresco y dispuesto a culminar cada tarea que te propongas.

Por ejemplo, ¿conocer la técnica del pomodoro? Trata de que trabajes por 20 minutos completos y tomes un pequeño descanso. De esa manera, durante 20 minutos te mantienes completamente enfocado en una sola actividad y le dedicas toda tu atención y esfuerzo. Al descansar, liberas la carga y te relajas. Luego, vuelves a poner toda tu atención en el trabajo por 20 minutos más. De esa manera reduces la tentación de las distracciones y te mantienes productiva, organizada y tranquila.

Existen otros métodos como la regla 80-20, la ley de Parkinson o el principio de Pareto.

6.- Decide una hora de finalización del trabajo: Así como tienes una rutina y un horario para comenzar a trabajar, ten una rutina y un horario para finalizar.

Tu cerebro (y tu cuerpo) necesitan saber cuándo terminó la jornada para poder estar tranquilo y enfocarse en otras cosas.

Una buena manera de decirle al cerebro que el día laboral terminó es haciendo la lista de tareas del día siguiente. También puedes apagar el computador y… por qué no, hasta apagar el teléfono.

Entendemos que cambiar tu rutina de teletrabajo puede ser complicado. Sin embargo, piensa cómo estas actividades te pueden ayudar a mantenerte más organizada, productiva y en paz.

Para comenzar, solo necesitas integrar una en tu día a día. Cuando ya hayas creado un nuevo hábito, suma una segunda. Luego una tercera y así hasta haber modificado toda la organización de tu día de teletrabajo.

¿Implementas alguna de estas recomendaciones en tu rutina de teletrabajo? ¿Tienes alguna otra recomendación que te haya funcionado y pueda ser muy útil para otras asistentes virtuales? Déjanos saber en los comentarios.