Esta situación con seguridad la conoces: Tienes la idea perfecta para un negocio, has analizado el mercado y concluyes que tu idea tiene futuro porque soluciona un problema puntual de un grupo de personas.Fabricas tu producto o estructuras tu servicio y te lanzas al mercado. No hay forma de fallar. Además, por fin podrás trabajar para ti mismo. Cero jefes. Y aunque durante los primeros meses tuviste un crecimiento vertiginoso, poco apoco te vas dando cuenta que trabajas más horas que en tu trabajo anterior y pasas casi todo el día sumergido en un papeleo interminable. Ya no te queda tiempo para salir con tu familia, estudiar o ir al gimnasio. Y ni hablar de tiempo para desarrollar nuevas ideas para tu emprendimiento. La verdad, te sientes muy frustrado.

¿Qué ha pasado? Te ha pasado lo que le sucede a la mayoría de los emprendedores y pequeños comerciantes: te has quedado sin tiempo. Y no porque no sepas optimizar tu tiempo o que no seas productivo, sino que no eres un súper héroe capaz de encargarte de todas las áreas de tu empresa.

Los emprendedores y dueños de pequeñas empresas sienten la necesidad de hacerse cargo de absolutamente todo en sus negocios. Sobre todo cuando están comenzando. La falta de ingresos económicos constantes y el miedo a gastar los ahorros son las principales objeciones para contratar a un empleado. Y tienes razón. Es demasiado pronto para sumarte un gasto fijo de ese tipo.

En un inicio puedes (y hasta debes) ocuparte de cada aspecto de tu negocio. Básicamente porque debes saber cómo hacerlo. Pero a medida que vas creciendo, se te irá haciendo más difícil asumir todas las responsabilidades porque inevitablemente descuidarás lo realmente importante: crecer tu empresa.

Pero seamos sinceros. No es común que sepas hacer todas las actividades que tu empresa requiere para avanzar. Quizás eres experto en eso que ofreces y además tienes conocimiento de comunicación y lo básico de finanzas. Pero te cuesta mucho el tema fiscal. Sería muy peligroso para tu empresa encargarte de los impuestos “como tú crees que es” y no contratar a un experto para que se ocupe de esta área fundamental.

Ya sea que no cuentas con el tiempo para dedicarle a todo,que no tienes la experiencia para hacerlo u otra situación, a medida que tu emprendimiento avance te enfrentarás a situaciones puntuales que te dirán que ha llegado el momento de contratar ayuda. No necesariamente debe ser un empleado por las razones antes vistas, pero bien puede ser un Asistente Virtual. ¿Lo habías pensado?

¿Por qué un Asistente Virtual es lo que necesito para hacer crecer mi empresa?

En varios artículos anteriores hemos explicado cómo un Asistente Virtual te puede ser de mucha utilidad a la hora de que tu empresa crezca.

En nuestro artículo Qué es un Asistente Virtual y por qué mi empresa necesita uno, te contamos que “un Asistente Virtual es una persona especializada en un área específica que provee sus servicios de forma remota.Se suele encargar de tareas repetitivas y que consumen tiempo, pero que son necesarias para el correcto funcionamiento empresarial: administración,desarrollo web, marketing, social media, manejo de agenda, gestión de llamadas,entre otras.”

¿Te suena? Son justo esas actividades las que consumen tu valioso tiempo o las que no sabes ejecutar de forma correcta.

Contratar un Asistente Virtual tiene muchos beneficios,entre los que destacamos: te ahorra dinero ya que solo pagas por las horas que acordadas con el asistente, ahorras tiempo porque será él o ella quien se ocupe de esas tareas repetitivas y fundamentales, te ayuda a alcanzar los objetivos de tu empresa porque tú estarás enfocado en lo que necesitas para lograrlo y ya no trabajarás solo porque el asistente virtual se convertirá en tu compañero de trabajo.

Si ya estás casi convencido de que un Asistente Virtual es lo que necesitas, estos cuatro momentos te dirán si es el momento de contratar uno.

Cuatro situaciones que te dirán que necesitas un Asistente Virtual

1.- Cuando te crees súperhéroe: Sabemos que sigues a mucha gente en tus redes que dice que si trabajas muy muy muy duro, podrás con todo lo que tu emprendimiento o empresa requiere. Entonces trabajas más horas, respondes más correos, haces más llamadas, visitas más clientes potenciales. Y te encargas de las finanzas, el diseño, las redes, la programación… pero no avanzas. Es que no eres un superhéroe. Desecha la idea de que podrás hacer todo tú solo porque si estás a cargo de absolutamente todo, ¿cuándo crearás nuevas soluciones para hacer crecer tu negocio?

2.- Cuando se te va todo el día en tareas administrativas: Sí, está muy bien que sepas pagarlas cuentas, hacer facturas, responder emails, prospectar clientes, armar agenda, etc. Pero, volvemos al mismo punto, ¿en qué momento pensarás y ejecutarás nuevas ideas que te ayuden a crecer y a generar más dinero?

Y digamos que te esfuerzas más y en vez de trabajar 8 horas, le dedicas 10,12 y hasta más horas a tu empresa. ¿Sabes el impacto que esto tiene en tu salud física y emocional? Si te enfermas, tampoco podrás tener la empresa con la que sueñas.

¿Vives alguna de estas situaciones? ¡Bingo! Necesitas un Asistente Virtual.

3.- Cuando no existe balance entre tu vida laboral y tu vida personal: Si tu esposa, familia o amigos te preguntan cuándo tienes un momento libre para compartir con ellos,cuando dejaste de hacer esas otras actividades que te satisfacían como hacer ejercicio, ir al yoga o a tus clases de música o cuando dejaste de entretenerte con el cine o un buen libro porque te la pasas todo el día trabajando es un buen momento para plantearse la contratación de un Asistente Virtual.

4.- Cuando no tienes tiempo para ejecutar esa nueva idea: Si llevas meses pensando en una nueva solución para tus clientes, pero no encuentras el tiempo para ejecutarla y ponerla a prueba, debes plantearte con urgencia la contratación de un Asistente Virtual que se encargue de esas tareas que consumen tu tiempo. De esta manera, estarás más relajado para pensar nuevas ideas ya que tu empresa seguirá en funcionamiento con la ayuda de este profesional.

Ahora seguro te haces la pregunta de oro “¿Y dónde consigo un buen Asistente Virtual?”. Tenemos la solución para ti. En CiavGroup tenemos a los mejores Asistentes Virtuales de la región dispuestos a ayudarte con esas tareas fundamentales de tu empresa. Nuestros Asistentes Virtuales son seleccionados mediante un riguroso proceso. Además, cuentan con más de 5 años de experiencia y una sólida carrera universitaria.

Te garantizamos no solo profesionales de calidad, sino la seguridad de saber que tu información está segura con nosotros. Contamos con políticas de confidencialidad y código de ética. Si deseas más información, no dudes en hacer click aquí y nos contactaremos contigo.

Tu tiempo, como el de todos, es el recurso más importante que tienes. Pero, lamentablemente, es limitado. Contrata a ese AsistenteVirtual y dedica tu tiempo a lo importante.

¿Cuándo te diste cuenta de que necesitabas un Asistente Virtual? ¡Queremos conocer tu experiencia! Déjanos tu historia en la sección de comentarios.