Los asistentes virtuales hombres sí existen
Sin embargo, de acuerdo a la CEO y Fundadora de Ciav Group, empresa dedicada a la Asistencia Virtual, Lily Izurrieta, se estima que 80% de las personas que se dedican a esta profesión son mujeres.
La razón es muy sencilla: cuando una mujer se convierte en madre, desea en muchos casos dedicarle más tiempo a su bebé y a su hogar, pero sin abandonar su profesión. Hasta hace algunas décadas, la mujer optaba por abandonar su vida profesional y dedicarse en un 100% a sus hijos. Ahora, y gracias al avance de la tecnología, una madre profesional puede desde la comodidad de su hogar, seguir ejerciendo su profesión de distintas maneras. Una de esas formas es a través del emprendimiento como AV.
Además, cada día vemos con más frecuencia como muchos padres, sobre todo en Europa, optan por renunciar a sus trabajos full time para dedicarse a sus hijos, porque al igual que la Asistencia Virtual, el cuidado de los niños es asunto también de los hombres.
De igual manera, son muchos los hombres que también se dedican a colaborar con aquellas empresas y emprendimientos que requieren un poco de ayuda en ciertas áreas del negocio para poder crecer.
Porque al final, dar un servicio como el de asistencia virtual no distingue género ni edad, sino mucho profesionalismo, experiencia en un área específica, productividad, organización, constante preparación y ganas de servir a los demás.
El emprendimiento en América Latina
La era del emprendimiento está en su mejor momento y lo seguirá estando por mucho tiempo más. Se estima más de 580 millones de personas en el planeta son emprendedoras.
En Latinoamérica, las cifras no paran de crecer.
El sitio web Market Inspector presenta una infografía en donde evidencia la tasa de nuevos emprendedores en 2017 representada por el porcentaje de población adulta de entre 18 y 64 años que ha iniciado un negocio, que logró contratar empleados y pagar salarios dentro de cuatro a cuarenta y dos meses.
De acuerdo a su información, Brasil es el país más emprendedor de la región con 14% de nuevos emprendedores en 2017. Le siguen Colombia (11,3%) y Ecuador (11%). La información resalta un dato importante: en Brasil, hay más emprendedoras mujeres que hombres.
Sin embargo, un informe del Global Entrepreneurship Monitor, afirma que México es el único país de la región en donde las mujeres emprenden más que los hombres, mientras que en Brasil ambos géneros emprenden en la misma medida.
En cualquier caso, algo queda claro, si bien los hombres emprenden más que las mujeres globalmente, que en una industria como la Asistencia Virtual sean las mujeres las que lleven la batuta resulta esperanzador. Pero esto en ningún momento quiere decir que los hombres no tengan campo en esta actividad económica.
De hecho, puede verse hasta como una gran oportunidad para que las AV preparen a sus compañeros masculinos y los atraigan a este increíble mundo del servicio a otras empresas.
Aún existen muchos tabúes y mitos por superar. Por ejemplo, algunas personas tienen un concepto erróneo de la asistencia virtual y lo relacionan con el trabajo que podría realizar una secretaria hace 40 años.
Como siempre decimos, la Asistencia Virtual es una empresa en sí misma. Un AV no existe solo para contestar llamadas y tomar dictado. Es un emprendedor que presta sus servicios a otros emprendedores para ayudarlos a escalar sus negocios gracias a la colaboración en áreas vitales de la empresa del cliente.
A este mismo mito se enfrentan algunos AV hombres, quienes hasta prefieren ser llamados por otro título porque “asistente virtual” suena a secretaria.
Steve Young, asistente virtual estadounidense, asegura en un artículo para el blog Horkey Hand Book que cuando se habla de servicio, el género no juega un rol importante. Sin embargo, más adelante dice que no le gusta autodenominarse asistente virtual.
“Aunque ‘asisto’ a mis clientes con sus negocios, no quiero ser visto como un respondedor pasivo de los caprichos de mi cliente. Quiero ser visto como una parte integral de su equipo”.
En vista de eso, prefiere decir que ofrece servicios virtuales de negocios a sus clientes. Se ve a sí mismo un consultor práctico de negocios o hasta Consultor creativo.
¿Cuál es el problema con ser llamado Asistente Virtual? La verdad, no lo sabemos.
Al final, un AV (o consultor práctico de negocios, como Steve) debe tener ciertas características específicas que le dan valor a su profesión y lo hacen una pieza esencial dentro de una organización, ya sea otro emprendimiento o una gran empresa.
5 características que debe tener un buen asistente virtual
Ya seas hombre o mujer, para iniciarte en el mundo de la Asistencia Virtual debes cumplir con ciertas características esenciales que determinarán si estás preparado para iniciar este camino.
1.- Amplia experiencia: Si tienes una titulación universitaria que te avala como profesional en un área específica y acumulas experiencia en esta profesión, puedes dedicarte a ejercerla de forma virtual (si tu carrera lo permite). La experiencia es un activo muy valioso que no se compra en ningún sitio. La administración de empresas, el diseño, la redacción, la consultoría empresarial, la contaduría, el marketing son algunas de las profesiones más comunes dentro de la asistencia virtual. Además, puedes sumar a tu experticia otros activos como idiomas adicionales o carreras complementarias, que de seguro les serán de mucha utilidad a tus clientes.
2.- Vocación de servicio: Es importante comprender que el asistente virtual presta un servicio a otras personas. Prestar un servicio es muy distinto a vender un producto. El producto lo puedes cambiar si sale defectuoso, pero un mal servicio queda en la mente del cliente y se traduce en una pésima reputación. Hazte AV porque quieres ser emprendedor, crecer en tu profesión y servir de forma sincera a otros.
3.- Orden y productividad: Las características más valiosas en todo VA es el orden y la productividad. Al trabajar desde casa o desde una oficina compartida corres el riesgo de distraerte con demasiada frecuencia o de traspapelar documentos importantes ya sea porque los dejaste en algún lado en la casa o porque tu computadora es un desorden. Es importante que crees procesos de trabajo que te permitan tener un orden muy estricto en tu área de trabajo físico y virtual. Además, investiga las mejores prácticas de productividad y toma aquella que te resulte mejor.
4.- Compromiso con la constante educación: Un asistente virtual no debe quedarse solo con lo que aprendió en la universidad. La educación y preparación constante es vital para ofrecer a sus clientes el mejor servicio posible. Pero esta educación no debe limitarse exclusivamente a tu profesión, sino que debe extenderse a áreas de negocio (recuerda que eres dueño de tu propia empresa), de nuevas tecnologías y cualquier otra área que signifique un desarrollo en tu profesión.
5.- Curiosidad por la tecnología: La tecnología es vital para los asistentes virtuales porque es lo que le permite estar en contacto con sus clientes y ejecutar y entregar sus tareas. Un AV está abierto a probar nuevas tecnologías que optimicen su trabajo. Esto no significa que debas tener tu computador y teléfono celular lleno de aplicaciones que nunca uses, sino probar las disponibles y quedarte con aquellas que te resulten de más provecho.
La Asistencia Virtual es una profesión ideal para todo aquel que quiera independizarse, mantenerse en su carrera, crecer profesionalmente y prestar un servicio a otros emprendedores. No importa si eres hombre o mujer, joven o mayor, si realmente deseas colaborar con otras empresas y ser fundamental en su crecimiento, la asistencia virtual es donde debes estar.
¿Conoces algún asistente virtual hombre? ¿Crees que existen prejuicios en torno a la profesión? Cuéntanos tu experiencia.