Todos tenemos redes sociales. Sin embargo, son muy pocos los que tienen sitio web y se están perdiendo de la importancia y de todos sus beneficios.

No todos tenemos redes sociales, pero son muchos los pequeños negocios, como tú, que se apoyan en las redes para transmitir su mensaje y llegar a sus clientes potenciales.

Ya sea mediante Facebook, Instagram, Twitter o LinkedIn (por decir algunas), los pequeños Asistentes Virtuales tienen la posibilidad de crear contenido que sea de interés para sus seguidores, que despeje sus dudas y que los acerque a ellos. Y esto es magnífico. Hace más de 25 años, antes de la masificación del internet, solo podías hacer uso de los grandes medios de comunicación masiva para publicitar tu negocio, lo que costaba muchísimo dinero y era inaccesible para emprendedores y pequeñas marcas.

Además, anunciar en los grandes medios tenía un problema: llegabas a demasiada gente. Y te preguntarás: “¿Por qué llegar a mucha gente es un problema?”. Para una empresa pequeña como la de Asistentes Virtuales lo es porque su público es muy específico y la masificación solo hace que su mensaje se diluya. Además, es imposible medir si tu pieza comercial tuvo éxito o no. ¿Cómo mides cuántas personas vieron un comercial de tv o un anuncio en prensa? Es imposible.

Pero internet lo cambió todo. Y para mejor.

La revolución de los negocios gracias a Internet

La llegada de internet supuso una revolución global, incluidos los negocios. Muchísimas marcas, grandes y pequeñas, crearon sus websites: sitios en internet llenos de botones, con textos larguísimos, imágenes que jamás cargaban y a full color. ¡Wow! Era impresionante, sí… pero muy poco efectivo. Sin embargo, sembró los cimientos de lo que sería una efectiva presencia en internet que cumpla con los objetivos de la marca.

Luego aparecieron los blogs y muchísima gente (más que marcas) encontraron en ellos el lugar ideal para contar sus historias. Se hicieron famosos los blogs de cocineros, personalidades de la televisión, jóvenes deseosos por ser leídos, madres primerizas, etc. Se crearon comunidades gigantes. Estos “influencers” conectaron con sus audiencias porque les daban justo lo que querían: un lugar al cual pertenecer. Las marcas fueron a los blogs también, pero no para crear sus propias comunidades, sino para patrocinar a esos influyentes que resonaban en internet.

Con el paso del tiempo, las marcas vieron el potencial de los blogs para conectar con sus clientes potenciales e hicieron click. En la actualidad, pocas marcas pecan de no tener un blog en donde conectar con sus audiencias.

La llegada de las redes sociales supuso otra revolución en el mundo digital. Ahora la conexión era real, uno a uno. Estamos a un “seguir” de distancia de cualquier persona. Y esta oportunidad sí fue aprovechada por las marcas desde un principio. Sin embargo, hace falta más que una cuenta en redes sociales.

Por qué las redes son insuficientes para los emprendedores

Para las marcas, sobre todo los pequeños emprendimientos como los que tenemos los Asistentes Virtuales, las redes han significado la solución a algunos inconvenientes. Porque puedes llegar a muchas personas, de forma económica y obtener excelentes resultados.

A diferencia de los medios masivos, en internet (y sobre todo en redes) se puede y se debe medir resultados. Y aunque muchos emprendedores usan las redes como únicas plataformas para llegar a sus clientes potenciales, en realidad cometen un error. Principalmente porque las redes como Facebook o Instagram no indexan en los buscadores. ¿Qué quiere decir esto? Que si alguien está buscando un Asistente Virtual en Google, tu perfil de redes no va a aparecer. Entonces, esa persona que está de forma activa buscándote, simplemente no te encontrará.

Las redes son efímeras. Lo que publiques en este momento, desaparecerá en pocos minutos del feed de tus seguidores. Y si tu engagement no es el mejor, ni siquiera lograrás que vean tu contenido. ¿Qué puedes hacer? La respuesta ha estado frente a ti desde finales del siglo pasado: ten tu propio sitio web.

Razones por las que debes tener tu propio sitio web

Antes de que digas que no necesitas un sitio web porque aún eres muy pequeño, permítenos contarte que nadie es demasiado pequeño para internet. De hecho, tener tu propio espacio en la red te asegura la posibilidad de comenzar a ser encontrado por tus posibles clientes y, si compartes información relevante y única, comenzarás a aparecer en Google.

Pero veamos tres razones que terminarán de convencerte de tener tu sitio web ya mismo

Razón 1: Tu cliente potencial está en internet

¿Qué haces cuando ves un producto nuevo que te llama la atención? ¿O cuando se te daña el aire acondicionado de la casa? ¿Qué es lo primero que haces cuando quieres regalar algo lindo a una persona especial? Buscas en Google. Tomas tu teléfono celular y vas directo a Google para averiguar, buscar o informarte.

Tu cliente potencial está en Google, pero si solo tienes Facebook o Instagram, tú no estarás en ese buscador.

La única forma de estar en Google es por medio de un website: ya sea tu sitio o un blog. Lo importante es tener un espacio propio en donde te presentes, muestres lo que haces y demuestres que eres la mejor en esa área de especialización.

Así, cuando una persona escriba “asistente virtual en Bogotá”, tu sitio aparecerá entre los primeros. Si la información que encuentra resuelve sus dudas, habrás ganado su atención y ahora irá a buscarte en otras plataformas o te contactará por ese sitio web.

Si Instagram o Facebook desaparecen, tú seguirás existiendo en Google.

Razón 2: Despejas las preguntas más comunes de tus clientes potenciales

¿Qué busca tu cliente potencial en Google? A ver, te podemos dar algunas opciones:

Podríamos seguir por un largo rato, pero no es necesario. Tu cliente potencial busca respuestas a sus dudas más comunes. Y esas respuestas deben estar en tu sitio web o en tu blog. Luego, si así lo deseas, puedes crear con ese mismo contenido, publicaciones para tus redes sociales. Listo, dos pájaros de un solo sitio.

Razón 3: Te permite escalar tu negocio

Si pasas todo el día frente al computador solo ejecutando las tareas que te solicitan, estás perdiendo tiempo. Sí, porque te estás quedando en una sola arista de tu capacidad como profesional. Como Asistente Virtual tienes la posibilidad de escalar tu negocio, ir más allá, explorar nuevas áreas de esta profesión. Por ejemplo, en tu sitio web demuestras que eres tan bueno, que puedes ofrecer cursos. También puedes aprovechar tu artículos en el blog y publicarlos en algún medio de tu ciudad con la finalidad de ganar autoridad. Si te gusta el video, crea tu canal  y ofrece contenidos en video. Y cuando ya muchos clientes quieran trabajar contigo, abre tu propia agencia de Asistentes Virtuales y crea tu comunidad con asistentes preparados por ti. ¿Qué mejor garantía que eso?

Ya estás convencido. Lo sabemos. Pero ahora te preguntas cómo vas a hacer un sitio web si no sabes nada de diseño. Ey, recuerda que en Google podrás encontrar a ese Asistente Virtual que te colaborará con el diseño de tu sitio web.

¿Ya tienes tu sitio web? Cuéntanos tu experiencia.